Un día se nos ocurrió que teníamos que hacer algo con unas maderas que había guardadas y empezamos a dibujar y escribir las ideas que se nos ocurrían: así apareció la BibliotecaRobot. Que después giró sobre sí misma para convertirse en el LibreroChueco. De los recortes que nos quedaban y unos palitos redondos que compramos (sin saber para qué) surgió el Cubo de Luz.
Charla tras charla, idea sobre idea, apareció el concepto de la biblioteca con asiento, que terminó convertido en el SillónLector. Y como nos quedó bastante grande, decidimos construirle un hermano menor: el Sillón Mezquino.
Un sillón especial para los entusiastas de la lectura, con espacio para un montón de libros.
El hermano menor del Sillón Lector: con espacio para vos, varios almohadones... y muchos libros.
Cajones y estantes... para usarlo como vos quieras! Este mueble puede guardar muchísimas cosas.
Una biblioteca distinta: se expande, cambia, se vé distinta según desde dónde la mires. Tiene rinconcitos y balcones para tus libros, adornitos, cargar el celu, lo que se te ocurra.
La evolución de la Biblioteca Robot: el Chueco giró sobre su eje y se convirtió en una biblioteca de tres lados.
Nuestra pequeña cajita de luz, ideal para generar una iluminación tenue en un rincón de tu casa.
El banquito que sirve para todo: apoyar el mate o el tereré, sostenerte la botella de cerveza en el patio, apilar libros... incluso sentarte!
Un desarrollo que hicimos para nuestro propio escritorio. Una bandeja para organizar todas las cosas que siempre andaban sueltas por ahí.